Desde inicios de diciembre, instituciones financieras, como bancos o Afores, y hasta empresas de comercio electrónico y telecomunicaciones, solicitaron a sus usuarios mantener actualizados sus datos fiscales.
Mediante notificaciones se invitó a la gente a llenar o actualizar datos como su régimen y domicilio fiscal, al igual que el tipo de uso de Comprobante Fiscal Digital por Internet (CFDI).
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La fecha límite marcada por estas empresas o bancos es el 31 de diciembre, pues a partir del 1 de enero de 2023 será obligatoria la expedición del CFDI 4.0.
Tener estos datos al corriente sirven para que el contribuyente obtenga una factura o CFDI por la compra de un bien o servicio, el cual puede ser deducible de impuestos.
Lo anterior, como parte de la Reforma Fiscal 2022, que busca hacer más eficiente la expedición de documentos fiscales, impulsar la digitalización de información tributaria y reforzar los mecanismos de seguridad del CFDI.
¿Qué pasa si no actualizo mis datos fiscales antes del 31 de diciembre?
El principal problema que tendrán las personas si no actualizan sus datos fiscales es que no podrán emitir facturas electrónicas, advirtió Edilberto Castro, especialista fiscal.
“Por el lado de la autoridad se ve como un candado para darle más seguridad a nuestros datos fiscales, a pesar de que sea un trámite engorroso y que muchas personas dejan a última hora”, comentó el experto.
El analista recordó que previo a la época de las declaraciones anuales, que se hace entre marzo y abril, las empresas deben reunir información sobre retenciones de impuestos..
En el caso de los bancos o instituciones financieras, el tener actualizados los datos fiscales sirve para que no haya errores sobre ingresos o gastos de los contribuyentes, que posteriormente pueden ser deducibles.
Además de no poder emitir facturas, si los datos fiscales de una persona no están actualizados podrían ser acreedores a una multa aproximada de entre cuatro mil y hasta 11 mil pesos, según Juvenal Lobato Díaz, profesor de Derecho Fiscal de la Facultad de Derecho de la UNAM.
“Hay distintas infracciones dependiendo la información de qué se trate. Por ejemplo, este es el monto por no actualizar el domicilio fiscal, algo que es tan sencillo”, añadió el experto.
Los especialistas coinciden que no brindar estos datos también puede dar pie a que el Servicio de Administración Tributaria (SAT) “desconfíe” de los contribuyentes, es decir, por no saber cuál es su actual régimen o domicilio fiscal.
“Cuando el SAT se percate que esa información no está completa, le hará llegar un requerimiento al contribuyente para decirle que sus datos no están debidamente integrados, como previamente se solicitó”, agregó Juvenal Lobato Díaz.
Los contribuyentes tuvieron un año para hacer este trámite, según las disposiciones del SAT. Además, durante el 2022 se hicieron dos prórrogas para que las empresas conocieran estos nuevos sistemas de facturación.
¿Dónde obtener mis datos fiscales?
Los datos del régimen y domicilio fiscal se pueden conocer a través de una constancia de situación fiscal emitida por el SAT a través del siguiente link.
Para obtener dicha constancia, es necesario que el contribuyente conozca su RFC y contraseña.
