Estados Unidos declaró este lunes el arresto en Rusia del periodista estadounidense del Wall Street Journal Evan Gershkovich como un caso de “detención arbitraria“, lo que permite al gobierno redoblar los recursos para conseguir su liberación.
“He determinado que la Federación Rusa detuvo arbitrariamente a Evan Gershkovich”, anunció en redes sociales el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken.
En el mismo mensaje, el líder de la diplomacia estadounidense exigió la “inmediata liberación” del periodista y del exmarine Paul Whelan, encarcelado en Rusia desde 2018 también por una acusación de espionaje.
El servicio de seguridad ruso FSB dijo el 30 de marzo que había detenido a Gershkovich, acusándolo de reunir información sobre una empresa de defensa rusa que era secreto de Estado.
El Wall Street Journal ha negado que Gershkovich haya estado espiando, mientras que la Casa Blanca calificó de “ridícula” la acusación
En un comunicado, el portavoz del Departamento de Estado Vedant Patel explicó que, con este anuncio, “el Gobierno de Estados Unidos brindará todo el apoyo necesario al señor Gershkovich y a su familia“.
“Condenamos la permanente represión del Kremlin en contra de las voces independientes en Rusia y su guerra contra la verdad”, declaró.
El periodismo no es un delitoVedant Patel
Cuando el Departamento de Estado cataloga el arresto de un estadounidense en el extranjero como un caso de “detención arbitraria”, se activan los protocolos dentro del Gobierno para desarrollar una estrategia para conseguir su liberación.
El día de la detención de Gershkovich, Estados Unidos convocó la al embajador ruso en el país, Anatoly Antonov, para que diera explicaciones, mientras que Blinken llamó el 2 de abril al ministro ruso de Exteriores, Serguéi Lavrov, para exigirle la liberación.