Los doctores que atienden a la reina Isabel II se mostraron este jueves preocupados por su estado de salud y han recomendado que quede bajo supervisión médica.
En un comunicado, el Palacio de Buckingham informó de que la monarca pese a todo se encuentra cómoda y sigue en el castillo de Balmoral, en Escocia.
El príncipe William, segundo en la línea de sucesión a la corona británica, viajó a Escocia para estar con la su abuela, según informó el palacio de Kensington, residencia oficial del duque de Cambridge.
El mayor de los hijos del príncipe Carlos, que se acaba de mudar a una vivienda en los terrenos del castillo de Windsor –cercano a Londres y donde suele residir últimamente la soberana– fue visto ayer llevando a sus tres hijos a su nuevo colegio cerca de Ascot, ubicado en la zona.
El príncipe William ha asumido más compromisos oficiales para ayudar a su abuela debido a su avanzada edad, pues tiene 96 años.
Por su parte, la recién nombrada primera ministra, Liz Truss, aseguró que Reino Unido está profundamente preocupado por las noticias recibidas de Buckingham sobre la salud de la reina.
“Mis pensamientos –y los de todo el mundo en el Reino Unido– están con su Majestad la Reina y su familia en este momento”, señaló la nueva jefa del Gobierno a través de Twitter.
Desde hace meses la salud de la monarca británica ha causado inquietud, ya que sus apariciones en compromisos públicos se han ido reduciendo poco a poco.
Muestra de lo anterior es que la investidura de Truss como primera ministra de Reino Unido tuvo lugar en Balmoral y no en el Palacio de Buckingham.
Igualmente, en mayo el príncipe Carlos pronunció por primera vez el Discurso del Trono en el Parlamento, una de sus principales funciones constitucionales de la monarca.