La puerta 36, utilizada por migrantes para entregarse a las autoridades de Estados Unidos y solicitar el asilo político, fue blindanda para evitar que entren sin hacer los trámites correspondientes.
La mañana de este sábado, trabajadores contratados por la Patrulla Fronteriza, instalaron alambre de púas para no permitir la entrada de los migrantes por ese lugar.
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Fue el pasado martes cuando cientos de centroamericanos y sudamericanos acudieron a la puerta 36 para entregarse a las autoridades norteamericanas, alentado por el incendio en Cd. Juárez donde falllecieorn 39 migrantes.
En ese lugar, fueron mil personas, en su mayoría familias, las que fueron recibidas para su trámite, pero antes de eso, se les informó por parte de los agentes migratorios que serían retornados a México una vez que se registrarán para el asilo político.
Los migrantes que no fueron recibidos, permanecieron en el bordo del río Bravo en la llamada puerta 36, a la altura de la calle Arizona, en Ciudad Juárez, para ver si los recibían, pero ya no hubo respuesta.
El lugar estaba sin migrantes por lo que se inicó con los trabajos de la colocación del alambre de púas para dar más protección a la entrada a Estados Unidos, aparte del muro construido por el presidente Donald Trump.
Nuevamente, los venezolanos, hondureños, salvadoreños y guatemaltecos, regresaron a los cruceros y el centro de Ciudad Juárez, para solicitar el apoyo ciudadano en monedas.
Limpian parabrisas o vendiendo chicles y dulces es la manera en que tratan de sobrevivir en esta frontera, en espera de la cita que tramitaron por la aplicación del CBP-0NE.
Se retiran del plantón del INM incendiado
Los extranjeros que iniciaron un plantón afuera de las oficinas cerradas del Instituto Nacional de Migración, abandonaron el lugar para dedicarse a solicitar el apoyo de los juareses y sobrevivir en esta ciudad.
Un día después de los trágicos hechos, cientos de migrantes acudieron a la zona resguardada por elementos de la Guardia Nacional para exigir justicia por sus hermanos Muertos en el incendio.
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En es el lugar permanecieron día y noche, personas religiosas les llevaban comida, agua y barigo, pero este sábado decidieron abandoner su plantón y dedicarse a su lucha por sobrevivir en las calles.
Publicada originalmente en El Heraldo de Juárez
