Culiacán, Sin.- En 2022 la estadística de homicidios dolosos disminuyó, pero no así los asesinatos de alto impacto, en un lapso de cuatro meses, tres homicidios cimbraron a la opinión pública y en los tres casos, no hay ninguna persona detenida.
De los más de 500 crímenes que registra la Fiscalía en este fin de año, destacan los homicidios del reconocido periodista Luis Enrique Ramírez, la madre rastreadora de Elota, Rosario Lilián Rodríguez Barraza y el subdirector de la Policía Municipal de Culiacán, Juan Miguel Silva Alvarado, conocido como “El Bóxer”.
La muerte de la verdad
El fundador del sitio noticioso Fuentes Fidedignas, y columnista del Debate, fue encontrado sin vida el jueves 5 de mayo, al sur de la colonia Antorchista, en el campestre La Nachi, perteneciente a la ciudad de Culiacán.
El cuerpo del comunicador estaba envuelto en plástico, fue arrojado por un vehículo en el sitio del hallazgo. La autopsia arrojó como causa de muerte daño craneoencefálico. Pronto, se hicieron promesas de resolver en corto plazo el asesinato, pero todo ha quedaron en un proceso judicial empantanado, sin nadie tras las rejas.
En julio las autoridades lograron aprender a Brisya Carolina quien fue puesta bajo prisión preventiva, por el delito de encubrimiento por favorecimiento en el asesinato del periodista. La mujer resultó ser la pareja sentimental de quien se presumía fuera el autor intelectual del acto.
La audiencia inicial de Brisya fue diferida debido a que la carpeta de investigación no fue entregada por la Fiscalía. Finalmente salió libre con un amparo en la mano y actualmente puede quedar libre de culpa debido a la mala fundamentación del caso. Los otros dos sujetos con órdenes de aprehensión siguen en libertad, el gobernador Rubén Rocha señaló que los delincuentes posiblemente reciben ayuda del interior de la Fiscalía para escapar de los operativos.
La caída de “El Bóxer”
Una muestra de que en Culiacán ni siquiera la policía está segura, fue el episodio que se vivió la noche del 6 de agosto, fecha en la que Juan Miguel Silva Alvarado (“El Bóxer”) fue abatido a tiros por un grupo armado mientras realizaba su labor como subdirector de la corporación.
La mañana de ese día, “El Bóxer” había sido asumido el cargo de ser la mano derecha en la seguridad de la capital sinaloense. Tan comprometido estaba con el cargo que prontamente organizó un operativo por bares y antros del Desarrollo Urbano Tres Ríos.
Un convoy formado por varias patrullas antes de las 10 de la noche arribó a dicho sector, ubicándose en las inmediaciones del edificio corporativo 120, sobre el bulevar Alfonso Zaragoza Maytonera. Lo que indica la versión oficial, al menos unas 10 camionetas de sujetos armados interceptaron al comandante y a los 12 policías que iban con él.
Ante esto, el comandante trató de dialogar con los pistoleros, pero las palabras salieron sobrando debido a que dos cargadores de cuerno de chivo tenían el nombre de “El Boxer”.
“Se le advirtió que no podía estar en contra del “Indio””, comentó una fuente que verbalizo uno de los agresores, para después realizar múltiples detonaciones en contra del recién nombrado subsecretario de Seguridad Publica Municipal de Culiacán.
Como si se tratase de nada, los gatilleros ingresaron a sus vehículos y se marcharon, dejando a los policías desarmados y perplejos ante la caída de su comandante.
Este hecho fue catalogado como extraño por el gobernador del estado, Rubén Rocha Moya, debido a que la corporación no tenía registro del recorrido, además de que no se usó el botón de pánico. Este último hecho llamó la atención de la fiscalía, quien procedió a realizar entrevistas a los escoltas presentes durante el crimen.
“Querida madre rastreadora”
Rosario Liliana Rodríguez, originaria de Elota, dedicaba su vida a remover la tierra del estado en busca de su hijo desaparecido desde el 2019, Fernando Abixahy. Pero sus labores se vieron finiquitadas.
El 30 de agosto, irónicamente en el Día Internacional del Desaparecido, se encontró su cuerpo a orillas de las vías del tren, por la avenida Manuel Pilar Abraham de la colonia Víctor Manuel Quintero, en el municipio en el que residía.
La versión indicaba que la integrante del colectivo “Corazones sin Justicia”, había sido privada de su libertad por un grupo armado que intervino en su domicilio, un día anterior del hallazgo de su cadáver. Ante el hecho, colectivos de búsqueda de personas desaparecidas, organizaciones de la sociedad civil y hasta organizaciones internacionales como la ONU condenaron el asesinato de la madre rastreadora. Pero parece ser que las voces que exigen justicia no son suficientes como para dar con los culpables del delito.
Hasta la fecha, lo único que salieron a expresar las autoridades ha sido su compromiso con este caso, sin embargo, no ha habido avances en la carpeta, o al menos no han sido revelados a la prensa.
Las mujeres que faltan
Si bien es cierto que los índices por feminicidio han descendido, la brutalidad con la que se les arrebata la vida a las mujeres sigue siendo escabrosa. Norma Anahí, fue vista por última vez el 9 de diciembre en un en expendio de cerveza ubicado en el bulevar Rosendo G. Castro y calle Playas las Glorias, en el fraccionamiento Prados del Valle, en la ciudad de Los Mochis, Sinaloa. Donde abordó un taxi con rumbo desconocido.
Dos días después de que se emitiera la alerta ámber, el 14 de diciembre, el cuerpo de la joven fue encontrado en un canal ubicado en el ejido 20 de noviembre. Prontamente, la Fiscalía logró aprender a Ramón Antonio “R” a un día del hallazgo. Posteriormente, fue vinculado a proceso el 19 de diciembre.
Este caso fue bastante rápido en el proceso judicial, sin embargo, aún hay feminicidas que ni siquiera han sido identificados por la Fiscalía. A pocos días de culminar el año, el órgano de investigación registró 30 homicidios contra mujeres, de los cuales 21 fueron encarpetados como feminicidio y 9 como homicidios dolosos.
Asimismo, solo 15 han logrado concretar una carpeta ya judicializada, y el futuro no pinta muy bien. Según las declaraciones hechas por la titular de la SeMujeres, María Teresa Guerra Ochoa, los índices de arrestos por feminicidio van a la baja.
“Habíamos arrancado con un 80% de detenciones, sin embargo, esta cifra actualmente está en un 50%. No podemos hoy presumir que esa es la estadística, lo que sí traemos es un 75% de casos con vinculación a proceso”.
Teresa Guerra Ochoa, Titular de Semujeres
Ningún detenido
Por los asesinatos de Luis Enrique, “Bóxer” y Rosario, no hay ninguna persona detenida; en el caso del periodista, los responsables siguen prófugos.
