Desde luego que los que somos aficionados al fútbol, para nada estamos conformes con el accionar de la selección mayor en el inicio de un nuevo ciclo hacia el próximo mundial, aun muy lejano, bajo la batuta de Diego Cocca, pero de lo malo, lo menos; el objetivo de calificar en la mentada Copa de Naciones, se logró con muchos sustos y apuros, con seleccionados divido en dos, los más jóvenes, algunos de ellos cepillados en la etapa final hacia Qatar, y los de mayor edad o jerarquía dentro del tricolor.
En ambos casos, lo mostrado fue paupérrimo, la victoria ante Surinam al son de 2-0, se logró gracias a que los caribeños como que se les acabó la gasolina, pero por momentos fueron hasta dueños de la pelota y con relación a su pasado, nada que ver, han dado muchos pasos hacia adelante, varios de sus jugadores militan en equipos de Europa, en donde a todo aquel de piel algo más que morena, estará siempre en la mira de buscadores, su fortaleza y velocidad son como oro molido porque una vez en el llamado viejo mundo se les dedica mucho tiempo a la técnica individual de tal manera que con el paso del tiempo combinan muy bien sus atributos físicos al trabajo técnico y se convierten en excelentes jugadores.
Que decir de Jamaica, hace rato que México no pinta ante los morenos jamaiquinos a quienes no lograron derrotar durante la eliminatoria anterior y en esta liga de naciones tampoco, porque empataron en tierra caribeña y ayer en el estadio Azteca, inmueble que aun con tanto público en su apoyo, tiene rato que dejó de pesar. Y eso de apoyo debemos de entrecomillarlo, porque el domingo el público muy molesto se metió y fuerte con el equipo, su director técnico y en especial con dos jugadores. Memo Ochoa y Raúl Jiménez; el primero tuvo mucho que ver en un gol, pero al mismo tiempo mucho que ver en el triunfo porque en la recta final, gracias a su intervención no cayó la tercera anotación de Jamaica. En cuanto a Jiménez, de plano, totalmente perdido, seguramente por la ansiedad de salir de un hoyo en el que se metió hace mucho tiempo atrás.
Jamaica, nos sorprendió, no cuando tuvo la ventaja, sino por cuando estaba a mano con México, no se salió de su scrip, cuando estaba obligado a ir con todo al ataque, incomprensible hacer tiempo por cualquier motivo, cuando debió ser todo lo contrario, así es que habrá que darle las gracias a su conformista postura de no lanzarse con todo aun a expensas de algún contragolpe de los verdes.
Nuestros jugadores, especialmente los que militan en Europa, tantos lo que ven más acción como los que están más tiempo en la banca, continuaron en la misma tónica que el anterior ciclo, sin justificar el porque están en el fútbol donde las ligas son mucho más exigentes en todos sentidos, nos referimos a los entrenamientos y a la acción dentro de sus torneos.
La gente, encabronada por lo sucedido en noviembre en Qatar, pero con ganas de ver otra cara de la selección, salió aun más enojada, desde luego, Diego Cocca, no se fue en blanco porque junto con los jugadores se llevó un abucheo monumental. En su defensa podemos apuntar que su trabajo apenas inicia y si al anterior le tuvieron un mundo de paciencia y el beneficio de la duda, justo es que a Cocca también, ahora bien, no sabemos hasta cuando tenga de margen para darle otra cara al seleccionado. Se programarán varios juegos en fechas donde los cubes de Europa no tendrán la obligación de soltar a sus jugadores, así es que será ahí donde veremos si Diego Cocca, empieza a cambiar las piezas dándole oportunidad a jugadores que levantan han mano y no se les ha dado la oportunidad
