Los eclipses solares y lunares son de los fenómenos astronómicos más fascinantes que podemos observar desde la Tierra, lo que genera un espectáculo entre las personas en general.
Sin embargo, a lo largo de la historia se han generado diversas creencias en torno a ellos, entre las cuales destaca el mito de que los eclipses pueden afectar negativamente a las embarazadas. Pero, ¿qué hay de cierto en esta creencia popular? Aquí te lo contamos.
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El mito
La creencia de que los eclipses afectan a las embarazadas se remonta a la antigua Grecia, donde se creía que la luz del sol y la luna ejercían una influencia directa sobre el cuerpo humano. Según esta teoría, la luz de estos astros tenía un efecto magnético en el líquido amniótico, lo que podía alterar el estado de ánimo y la salud del feto en desarrollo.
A pesar de que hoy en día sabemos que esta teoría carece de fundamento científico, sigue siendo una creencia popular en muchas culturas alrededor del mundo.
Entre las creencias más comunes en torno a los eclipses solares y lunares y su relación con las embarazadas, se encuentran:
- Los eclipses pueden causar abortos espontáneos o partos prematuros.
- Los bebés nacidos durante un eclipse tendrán mala suerte o estarán destinados a vivir una vida difícil.
- Las embarazadas deben evitar salir durante un eclipse, ya que la radiación puede afectar negativamente al feto.
- Las embarazadas deben hacer ciertos rituales o amuletos para protegerse de los efectos negativos de los eclipses.
Muchas mamás, especialmente en México, optan por medidas inofensivas para cuidarse de cualquier repercusión, como el uso de lazos rojos a lo largo del vientre o permanecer en casa durante la permanencia de dichos fenómenos astrológicos, acciones que prevalecen como costumbres que se transmiten de generación en generación.
Sin embargo; como mencionamos anteriormente, estas creencias carecen de fundamento científico y no hay evidencia que respalde su veracidad, por lo que no hay razón para que las embarazadas se preocupen por los efectos negativos de los eclipses en su salud o en la del feto en desarrollo.
Eclipses del 2023
Este año 2023, podremos observar varios eclipses tanto solares como lunares. Uno de los más esperados será el próximo eclipse total de sol el 20 y 21 de abril, visible desde una pequeña franja del planeta, principalmente en el sudeste de Asia y Australia, así como en los océanos Pacífico e Índico y, en la Antártida.
Además, para nuestro lado del planeta, nos espera el eclipse anular del sol, con fecha del 14 de octubre, que será visible en el oeste de África, América del Norte, Sudamérica y en los océanos Pacífico y Atlántico.